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Opciones y futuros

Opciones; Influencia de los dividendos

 A la hora de comprar o vender opciones debe tener en cuenta que, a corto plazo, los dividendos pagados por una empresa suelen descontarse del precio de sus acciones.
Supongamos que Telefónica va a pagar un dividendo el día 20 de Febrero de 0,50 euros y el día 19 de Febrero cierra a 20 euros.
En teoría la acción de Telefónica descontará esos 0,50 euros al día siguiente y abrirá el 20 de Febrero a 19,50 euros, de forma que aquellos inversores que el día 19 de Febrero tenían una acción que cotizaba a 20 euros, el día 20 de Febrero tienen una acción que cotiza a 19,50 euros y un dividendo de 0,50 euros.
En la práctica el descuento del dividendo no es siempre tan exacto, ya que la cotización de las acciones se forma por oferta y demanda y el día 20 de Febrero Telefónica no tiene por qué abrir inexcusablemente a 19,50 euros, pudiendo hacerlo a 19,40, 19,60 ó incluso 20,20 euros, dependiendo de lo que haya sucedido en la noche del 19 al 20 y cómo haya influído en las expectativas de los inversores.
En cualquier caso, a la hora de valorar las opciones y decidir qué precio paga o cobra por ellas tenga en cuenta que lo más probable es que los dividendos que reparta una empresa se reflejen en su cotización a corto plazo, reduciéndose la cotización en una cifra similar al dividendo el día en que se pague dicho dividendo. Este dividendo lo cobra aquellos inversores que tengan acciones de la empresa, pero no los que tengan opciones sobre acciones de dicha empresa.

Opciones; Fecha de vencimiento

Todas las opciones tienen una fecha de vencimiento, pasada la cual dejan de existir y no tienen ningún valor. Las opciones pueden comprarse y venderse libremente hasta el cierre de la sesión de la fecha de vencimiento.
Esta es una de las diferencias fundamentales entre comprar una opción y comprar el activo subyacente.
Si una persona compra acciones de Telefónica el 2 de Enero a 20 euros y las vende a 23 habrá ganado 3 euros (23-20), independientemente de que Telefónica haya tardado en subir 1 mes ó 10 meses en subir de 20 a 23 (Nota: para calcular la rentabilidad real de una inversión siempre hay que tener en cuenta la inflación).
Pero cuando se compra una opción call no sólo hay que acertar en que las acciones de Telefónica van a subir, sino cuándo lo harán. Por ejemplo, si alguien compra el mismo 2 de Enero una opción call sobre Telefónica con precio de ejercicio 20 euros y fecha de vencimiento el 25 de Marzo para ganar dinero con esa operación Telefónica tiene que estar por encima de 20 euros el citado 25 de Marzo. Si en la fecha de vencimiento (25 de Marzo) Telefónica cotiza a 19,95 euros el comprador de la call habrá perdido todo el dinero que invirtió en la compra de esa opción call y ya no podrá aprovecharse de las posibles subidas de Telefónica posteriores a esa fecha.
Si el 10 de Abril Telefónica cotiza a 23 euros, la persona que compró las acciones a 20 euros el 2 de Enero las podrá vender a esos 23 euros, ganando 3 euros por acción. En cambio, la persona que compró la call ya no tiene nada y no puede obtener ningún beneficio por la subida de Telefónica entre el 26 de Marzo y el 10 de Abril.
Con las opciones put sucede lo mismo, no sólo hay que acertar que la acción va a bajar sino cuándo lo hará.
Cuanto más tiempo quede para el vencimiento más valor tienen las opciones. Se puede ver de forma intuitiva; si Telefónica cotiza a 18 euros las opciones call de Telefónica con precio de ejercicio 20 euros y vencimiento al día siguiente no tienen casi ningún valor, ya que es muy difícil (aunque no totalmente imposible) que Telefónica suba de 18 a 20 euros en un día. Sin embargo, si la fecha de vencimiento de esa opción es dentro de 1 año su valor aumenta mucho, ya que es mucho más probable que Telefónica suba de 18 a 20 euros en 1 año.

Opciones; Precio de ejercicio

El precio de ejercicio es el precio al que el comprador de una call tiene derecho a comprar las acciones (o cualquier otro activo subyacente) y el comprador de la put tiene derecho a vender las acciones. Es un dato conocido por ambas partes en el momento de iniciar la operación.
En todo momento se pueden comprar y vender opciones en un rango de precios muy amplio. La única limitación teórica es que los mercados en que cotizan las opciones establecen una serie de precios de ejercicio posibles, a los que tienen que adaptarse comprador y vendedor. Estos precios de ejercicio posibles se establecen en intervalos de 0,50 euros, 0,25 euros, 0,10 euros, etc., dependiendo del precio de la acción. Por ejemplo, en el mercado español de opciones sobre acciones los precios de ejercicio inferiores a 10 euros se suceden entre sí en intervalos de 0,25 euros (10,00 – 9,75 – 9,50 – 9,25 – ...), los precios entre 10 y 20 euros se diferencian entre sí en 0,50 euros (10 – 10,50 – 11,00 – 11,50 – 12,00 – ...), los precios superiores a 20 euros van de euro en euro (21,00 – 22,00 – 23,00 – 24,00 – ...), etc.
No pueden realizarse operaciones fuera de estos precios establecidos, por lo que habrrá que comprar o vender las opciones a un precio de ejercicio de 20 ó 21 euros, pero no de 20,09 ó 20,93.

En algunas ocasiones, debido a operaciones sobre el capital de una empresa como ampliaciones de capital o splits estos precios de ejercicio deben ajustarse a dicha operación y pueden tener valores que no sean redondos. Este ajuste es imprescindible para no perjudicar los intereses de los inversores que ya tuvieran posiciones abiertas.
Supongamos el caso de una empresa que realiza un split de 1 x 3 y que cotiza a 10,50 euros antes del split. Al realizar el split por cada acción de 10,50 que se tuvieran se pasan a tener 3 acciones con un precio de 3,50 euros (3 x 3,50 = 10,50). Si no se produjera el ajuste en los precios de ejercicio los compradores de opciones put tendrían un beneficio enorme (al “caer” la acción de 10,50 a 3,50), que sería la misma pérdida que tendrían que asumir los vendedores de esas put. Para evitar esa distorsión cada contrato de opciones y futuros sobre esa empresa se transforma en 3 y a la vez se dividen los precios de ejercicio de los contratos de opciones tambien por 3. Por ejemplo el poseedor de 1 contrato de opciones put con precio de ejercicio 10 pasará a tener 3 contratos de opciones put con precio de ejercicio 3,33. A partir de ese momento los nuevos vencimientos que se vayan abriendo tendrán precios de ejercicio en cifras redondas (3,00 – 3,10 – 3,20 – 3,30 – 3,40 - ...) pero los existentes en el momento del split mantendrán sus precios de ejercicio en cifras “extrañas” hasta su vencimiento.
Si Telefónica está cotizando a 20 euros en teoría es posible comprar y vender opciones con precios de ejercicio muy alejados, como 1 euro o 50 euros. Pero si usted quiere comprar necesita encontrar alguien que le quiera vender, y viceversa. Por eso, cuanto más se aleje de los precios de ejercicio cercanos a la cotización de la acción en ese momento más difícil le resultará encontrar contrapartida para poder cerrar la operación. Si Telefónica está cotizando alrededor de 20 euros le resultará fácil encontrar contrapartida en precios de ejercicio de 20, 22, 23, 18, 19, etc. euros, pero le resultará casi imposible encontrar a alguien que quiera hacer una operación con un precio de ejercicio de 5 euros o de 40, aunque nada le impide intentarlo.
Cada mercado y cada subyacente tiene sus normas para establecer estos precios de ejercicio, debe consultarlas antes de comenzar a operar.

Opciones Put

Las opciones put son derechos de venta. Por ejemplo un opción put sobre acciones de Telefónica da a derecho al comprador de esa opción a vender acciones de Telefónica a un precio determinado (precio de ejercicio) y hasta una fecha determinada (fecha de vencimiento).
Las opciones pueden comprarse y venderse en cualquier momento hasta la fecha de vencimiento. En la siguiente explicación se considera que las opciones se mantienen hasta la fecha de vencimiento para una mejor comprensión de su funcionamiento.
Supongamos una opción put sobre acciones de Telefónica con un precio de ejercicio de 20 euros y cuya fecha de vencimiento es el 25 de Marzo. El precio de esa opción es, por ejemplo, 1 euro y cada contrato representa 100 acciones de Telefónica. El inversor que compre esta opción deberá pagar 100 euros (1 euro por acción x 100 acciones que representa cada contrato), y a cambio tendrá el derecho (no la obligación) de vender 100 acciones de Telefónica a 20 euros hasta el 25 de Marzo, independientemente de cuál sea la cotización de las acciones de Telefónica en el mercado.
Si al llegar el 25 de Marzo las acciones de Telefónica están cotizando por encima de 20 euros (por ejemplo a 20,50 euros) al comprador de la put no le interesará ejercerla, ya que podrá vender esas 100 acciones de Telefónica a 20,50 euros en el mercado, en caso de que las tenga en su poder. Por eso, si sigue interesado en vender 100 acciones de Telefónica renunciará a ejercer la opción put y las venderá directamente en el mercado a 20,50 euros, cobrando 0,50 euros más por acción de los que cobraría si decidiera ejercer la put 20 de Telefónica.
En cambio, si Telefónica está cotizando a 19,50 euros le interesará ejercer la put y como resultado de esa operación venderá 100 acciones de Telefónica a 20 euros, 0,50 euros más que su cotización en el mercado (19,50). Es importante tener en cuenta que la prima que se paga por la opción da derecho a vender las acciones al precio de ejercicio, pero no se recupera. En este ejemplo el comprador pagó 1 euro por la prima de la opción (100 euros por contrato) y al ejercer la opción cobró 20 euros por acción (2.000 euros por contrato), con lo que cada acción de Telefónica le ha supuesto un ingreso real de 19 euros (20 al ejercer la opción menos 1 que pagó por la prima). En este caso, a pesar de que le haya interesado ejercer la opción, por cada acción de Telefónica ha obtenido 19 euros cuando en el mercado están cotizando a 19,50 euros.
Por tanto, cuando alguien compra una opción put espera que la acción va a bajar antes de la fecha de vencimiento. Y además espera que en dicho vencimiento la cotización esté por debajo del precio de ejercicio (20 euros en este ejemplo) menos la prima que paga por la opción (1 euro). En el anterior ejemplo, el inversor que compra la put 20 de Telefónica por 1 euro está esperando que la cotización de Telefónica el 25 de Marzo sea inferior a 19 euros (20 - 1), ya que en caso contrario no compraría dicha put. El comprador de una put empieza a ganar cuando la cotización es inferior al precio de ejercicio menos prima (los 19 euros del ejemplo). Mientras la cotización sea superior a dicha cifra el comprador de la put pierde dinero, pérdida que está limitada a la prima que pagó, ya que si Telefónica sufre una fuerte subida el comprador renunciará a su derecho y no tendrá ninguna otra obligación, independientemente de que Telefónica suba 24, 40 ó 60 euros.
El vendedor de esa opción put 20 sobre Telefónica es el que toma la posición contraria al comprador. Es decir, el euro por acción que paga el comprador lo recibe el vendedor, y a cambio se compromete a comprarle las 100 acciones de Telefónica a 20 euros hasta la fecha del vencimiento. Si el comprador ejerce la opción es el vendedor de dicha opción el que está obligado a comprarle las 100 acciones a 20 euros, independientemente del precio que tengan en el mercado en ese momento.
Una de las diferencias principales entre el comprador y el vendedor es que el comprador tiene el derecho a vender, pero no la obligación de hacerlo. En cambio el vendedor sí que está obligado a comprar en caso que el comprador de la opción lo solicite, y no tiene forma de evitar esa obligación. Por eso el riesgo del comprador está limitado, como máximo, a la prima que pagó y en cambio el riesgo del vendedor es muy elevado, ya que nada impide, teóricamente, que Telefónica pudiera cotizar antes del vencimiento a 19, 15 ó 10 euros. Si Telefónica llega a 10 euros en la fecha de vencimiento el vendedor de la opción put deberá comprar 100 acciones a 20 euros al comprador de la Put. Eso le supondrá una pérdida total de 900 euros ó 9 euros por acción, ya que el euro por acción que cobró como prima lo conserva (10 – 20 + 1 = -9) Estas caídas tan exageradas en un espacio relativamente corto de tiempo no son habituales, pero no son imposibles en una situación de crash bursátil, por lo que no deben ignorarse ni considerarse un escenario imposible a la hora de controlar el riesgo que se asume.
Por tanto, el vendedor de una opción put espera que la cotización suba, ya que si Telefónica llega a la fecha de vencimiento con un precio de 20,01 (o superior) al comprador no le interesará ejercer la opción y el vendedor habrá conseguido ganar 1 euro sin tener que comprar las acciones.
Este riesgo tan alto del vendedor de una opción put puede limitarse vendiendo acciones, comprando otras opciones y/o vendiendo futuros. Tambien es posible que al vendedor de la put le parezca que 20 euros es un precio razonable para Telefónica y además disponga del dinero, en cuyo caso pagaría 2.000 euros por las 100 acciones de Telefónica y las mantendría en cartera todo el tiempo que quisiera.
En la siguiente tabla se muestra la gananacia o pérdida de comprador o vendedor para diferentes cotizaciones de Telefónica en la fecha de vencimiento:
 
Cotización al vencimiento Resultado comprador Put Resultado vendedor Put
20,01 y cualquier cotización superior -1 (no ejerce y pierde la prima) +1 (gana la prima)
19,75 -0,75 (ejerce -1 + 0,25) +0,75 (+1 - 0,25)
19,00 0 (ejerce -1 + 1) 0 (+1 - 1)
18,00 +1 (ejerce -1 + 2) -1 (+1 - 2)
15,00 +4 (ejerce -1 + 5) -4 (+1 - 5)
10,00 +9 (ejerce -1 + 10) -9 (+1 - 10)
El comprador de una opción put tiene las pérdidas limitadas (su pérdida máxima es la prima que paga) y en cambio su beneficio, en teoría, es muy elevado aunque no ilimitado (la cotización no puede caer por debajo de 0). Por los mismos motivos el vendedor tiene las ganancias limitadas (su máximo beneficio es la prima que cobra al inicio de la operación) y las pérdidas máximas teóricas son muy elevadas (hasta que la cotización llegue a 0). A pesar de lo que parezca a primera vista en algunas ocasiones tiene más sentido vender una opción que comprarla, ya que además existen formas de limitar ese riesgo a un nivel conocido.

Opciones Call

Las opciones call son derechos de compra. Por ejemplo un opción call sobre acciones de Telefónica da a derecho al comprador de esa opción a comprar acciones de Telefónica a un precio determinado (precio de ejercicio) y hasta una fecha determinada (fecha de vencimiento).
Las opciones pueden comprarse y venderse en cualquier momento hasta la fecha de vencimiento. En la siguiente explicación se considera que las opciones se mantienen hasta la fecha de vencimiento para una mejor comprensión de su funcionamiento.
Supongamos una opción call sobre acciones de Telefónica con un precio de ejercicio de 20 euros y cuya fecha de vencimiento es el 25 de Marzo. El precio de esa opción es, por ejemplo, 1 euro y cada contrato representa 100 acciones de Telefónica. El inversor que compre esta opción deberá pagar 100 euros (1 euro por acción x 100 acciones que representa cada contrato), y a cambio tendrá el derecho (no la obligación) de comprar 100 acciones de Telefónica a 20 euros hasta el 25 de Marzo, independientemente de cuál sea la cotización de las acciones de Telefónica en el mercado.
Si al llegar el 25 de Marzo las acciones de Telefónica están cotizando por debajo de 20 euros (por ejemplo a 19,50 euros) al comprador de la call no le interesará ejercerla, ya que podrá comprar esas 100 acciones de Telefónica a 19,50 euros en el mercado. Por eso, si sigue interesado en comprar 100 acciones de Telefónica renuciará a ejercer la opción call y las comprará directamente en el mercado a 19,50 euros, pagando 0,50 euros menos por acción de los que pagaría si decidiera ejercer la call 20 de Telefónica.
En cambio, si Telefónica está cotizando a 20,50 euros le interesará ejercer la call y como resultado de esa operación comprará 100 acciones de Telefónica a 20 euros, ahorrándose 0,50 euros respecto a su cotización en el mercado (20,50). Es importante tener en cuenta que la prima que se paga por la opción da derecho a comprar las acciones al precio de ejercicio, pero no se “descuenta” del precio a pagar por las acciones. En este ejemplo el comprador pagó 1 euro por la prima de la opción (100 euros por contrato) y al ejercer la opción pagó otros 20 euros por acción (2.000 euros por contrato), con lo que cada acción de Telefónica le ha costado realmente 21 euros (1 por la prima y 20 al ejercer la opción). En este caso, a pesar de que le haya interesado ejercer la opción, cada acción de Telefónica le ha costado 21 euros cuando en el mercado están cotizando a 20,50 euros.
Por tanto, cuando alguien compra una opción call espera que la acción va a subir antes de la fecha de vencimiento. Y además espera que en dicho vencimiento la cotización esté por encima de la suma de la prima que paga por la opción (1 euro en este ejemplo) y el precio de ejercicio (20 euros). En el anterior ejemplo, el inversor que compra la call 20 de Telefónica por 1 euro está esperando que la cotización de Telefónica el 25 de Marzo sea superior a 21 euros (1 + 20), ya que en caso contrario no compraría dicha call. El comprador de una call empieza a ganar cuando la cotización supera la suma de la prima más el precio de ejercicio (los 21 euros del ejemplo). Mientras la cotización sea inferior a dicha cifra el comprador de la call pierde dinero, pérdida que está limitada a la prima que pagó, ya que si Telefónica sufre una fuerte caída el comprador renunciará a su derecho y no tendrá ninguna otra obligación, independientemente de que Telefónica caiga 18, 15 ó 2 euros.
El vendedor de esa opción call 20 sobre Telefónica es el que toma la posición contraria al comprador. Es decir, el euro por acción que paga el comprador lo recibe el vendedor, y a cambio se compromete a venderle las 100 acciones de Telefónica a 20 euros hasta la fecha del vencimiento. Si el comprador ejerce la opción es el vendedor de dicha opción el que está obligado a venderle las 100 acciones a 20 euros, independientemente del precio que tengan en el mercado en ese momento.
Una de las diferencias principales entre el comprador y el vendedor es que el comprador tiene el derecho a comprar, pero no la obligación de hacerlo. En cambio el vendedor sí que está obligado a vender en caso de que el comprador de la opción lo solicite, y no tiene forma de evitar esa obligación. Por eso el riesgo del comprador está limitado, como máximo, a la prima que pagó y en cambio el riesgo del vendedor es ilimitado, ya que nada impide, teóricamente, que Telefónica pudiera cotizar antes del vencimiento a 25, 30 ó 60 euros. Si Telefónica llega a 30 euros en la fecha de vencimiento el vendedor de la opción call deberá comprar 100 acciones en el mercado a 30 euros para vendérselas al comprador de la call a 20 euros. Eso le supondrá una pérdida total de 900 euros ó 9 euros por acción, ya que el euro por acción que cobró como prima lo conserva (20 – 30 + 1 = -9) Estas subidas tan exageradas en un espacio relativamente corto de tiempo no son habituales, pero no son imposibles en una situación de OPA, burbuja, etc., por lo que no deben ignorarse ni considerarse un escenario imposible a la hora de controlar el riesgo que se asume.
Por tanto, el vendedor de una opción call espera que la cotización baje, ya que si Telefónica llega a la fecha de vencimiento con un precio de 19,99 (o inferior) al comprador no le interesará ejercer la opción y el vendedor habrá conseguido ganar 1 euro sin tener que vender las acciones.
Este riesgo ilimitado del vendedor de una opción puede limitarse comprando acciones, otras opciones opciones y/o futuros. Por ejemplo, si el vendedor del ejemplo ya tuviera en su cartera 100 acciones de Telefónica en el momento de abrir la operación aunque Telefónica llegase al vencimiento con una cotización de 30 euros el vendedor de la call no tendría que comprar 100 acciones en el mercado a 30 euros, sino que entregaría las 100 acciones que ya tenía en cartera. La operación le habrá supuesto un coste de oportunidad, ya que tiene que vender a 20 euros unas acciones que ahora podría vender en el mercado a 30 euros si no hubiese vendido la opción, pero su riesgo estaba limitado en todo momento.
En la siguiente tabla se muestra la ganancia o pérdida de comprador y vendedor para diferentes cotizaciones de Telefónica en la fecha de vencimiento:
Cotización al vencimiento Resultado comprador Call Resultado vendedor Call
19,99 y cualquier cotización inferior -1 (no ejerce y pierde la prima) +1 (gana la prima)
20,25 -0,75 (ejerce -1 + 0,25) +0,75 (+1 - 0,25)
21,00 0 (ejerce -1 + 1) 0 (+1 - 1)
22,00 +1 (ejerce -1 + 2) -1 (+1 - 2)
25,00 +4 (ejerce -1 + 5) -4 (+1 - 5)
30,00 +9 (ejerce -1 + 10) -9 (+1 - 10)
El comprador de una opción call tiene las pérdidas limitadas (su pérdida máxima es la prima que paga) y en cambio su beneficio, en teoría, es ilimitado. Aunque en la práctica las cotizaciones no llegan a infinito nada impide, y a veces ocurre, que una empresa multiplique su valor por 2, 3, 10, ... veces durante la vida de una opción. Por los mismos motivos el vendedor tiene las ganancias limitadas (su máximo beneficio es la prima que cobra al inicio de la operación) y las pérdidas sin embargo son ilimitadas. A pesar de lo que parezca a primera vista en algunas ocasiones tiene más sentido vender una opción que comprarla, ya que existen formas de limitar ese riesgo a un nivel conocido.

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