Las palabras más útiles en bolsa son: quizá, según se espera, posiblemente, podría ser, no obstante, a pesar, ciertamente, yo creo, yo opino, pero, posiblemente, me parece... Todo cuanto se cree y dice es condicionado (André Kostolany)
Mucha gente, al pedir consejos para sus inversiones quiere saber exactamente cuál es la empresa que más va a subir este año, a cuánto cotizará Telefónica a final de año, si Iberdrola ha hecho ya el mínimo, a cuánto bajará el Banco Popular antes de volver a subir, etc.
Pero el mundo de la Bolsa no es un mundo de exactitudes, sino de probabilidades y estimaciones. Por ejemplo, para ganar dinero a largo plazo es suficiente con llegar a estimar que una empresa es buena , está barata y su negocio crecerá en los próximos años. Sería ideal saber exactamente cómo de buena es la empresa, si estará más barata o no en el futuro y cuánto crecerán exactamente sus beneficios, pero no es realista.
Es preferible tener buenas aproximaciones que datos exactos que no se van a cumplir.