Errores sobre el dinero; Confiar en la suerte
Casi nadie se hace rico por suerte. Lo normal es que sea un proceso prolongado en el tiempo de trabajo, ahorro e inversión.
Se puede esperar a la suerte (lotería, por ejemplo) pero lo más probable es pasarse la vida esperando sin que llegue. Incluso cuando llega una gran parte de los afortunados no sabe gestionar el dinero que ha recibido de golpe y puede acabar perdiéndolo con relativa facilidad.
Aumentar el nivel de vida de cada persona es cuestión de planificación y perseverancia. Es un camino más lento, pero mucho más seguro porque siempre da buenos resultados a los que deciden seguirlo y no lo abandonan. Tiene además la ventaja de que el patrimonio adquirido de esta forma es mucho más estable y tiende a perdurar en el tiempo porque la capacidad de gestionar dinero de la persona aumenta al mismo ritmo que lo hace su patrimonio, fruto de la experiencia y la reflexión.
Esperar a la suerte es perder el tiempo y retrasar la llegada de esa mejora del nivel de vida que tanto se espera. Lo racional es comenzar hoy (si no se ha hecho ya) a planificar el futuro del ahorro y la inversión porque es la forma habitual de hacer crecer el patrimonio de una persona y la que asegura los buenos resultados, aunque no sean tan rápidos como a todos nos gustaría.