La estrategia ofensiva

Tengo calculado el efecto que tendría la entrada de dinero extra en la reducción del tiempo necesario para alcanzar la independencia financiera de forma que en estos momentos soy capaz de cuantificar con bastante precisión como afectaría a mi proyecto personal la entrada de distintas sumas de dinero. Os propongo que calculéis, por ejemplo, el efecto de los siguientes ingresos en la reducción del tiempo que necesitaríais para poder jubilaros:

-  10.000€ extra en un año por un trabajo que no tiene continuidad en el tiempo.

-  1.000€ extra anuales que se mantengan constantes durante los próximos 20 años.

Además, yo he calculado cuanto gano exactamente por hora en mi actual trabajo teniendo en cuenta las pagas extra y el mes de vacaciones. Para este cálculo contemplé el tiempo de los desplazamientos trabajo-casa como parte de la jornada laboral.

Estos tres parámetros me sirven de referencia a la hora de valorar si me interesa o no aceptar cualquier tipo de trabajo extra. A día de hoy sería muy difícil que aceptase un trabajo extra simplemente por dinero (a no ser que estuviese realmente bien remunerado) y busco más bien alguna actividad  que me aporte al mismo tiempo otro tipo de satisfacciones.

Dejando a un lado la obtención de rentas mediante la inversión, las siguientes vías de ingresos extra son algunas de las que en principio creo que se nos pueden ocurrir a todos:

-  Conseguir un segundo trabajo

-  Aceptar un puesto de mayor responsabilidad en mi empresa

-  Montar mi propia empresa

-  Cobrar derechos de autor por alguna creación (música, libros, software…)

-  Tener un hobby que genere ingresos

-  Cobrar ingresos por publicidad

Las dos primeras vías las tengo descartadas porque seguro implicarían una reducción importante en mi calidad de vida actual y dudo que los ingresos extra pudiesen compensar la pérdida de tiempo libre y el nivel de estrés que conllevan ciertos puestos de responsabilidad.

En cuanto a montar mi propia empresa, es algo que de vez en cuando siempre se te pasa por la cabeza aunque tengo claro que yo no nací empresario. Siempre puede aparecer una idea de negocio que en un primer momento me llene de ilusión pero luego me pongo a pensar fríamente en la inversión económica inicial y en el tiempo de dedicación que es más que probable que te vaya a exigir y al menos yo me lo pienso dos veces.

Relacionado con este tema os recomiendo la lectura de “El libro negro del emprendedor” que bajo mi punto de vista hace una exposición muy buena de los problemas con los que te vas a encontrar a la hora de lanzarte a una aventura empresarial. El libro no creo que busque desanimar a nadie sino simplemente advertirte de las piedras que te vas a encontrar en el camino.

En el campo de los derechos de autor ya tengo algo avanzado el tema y me proporcionan unos pequeños ingresos anuales que año tras año van a menos. El primer año los ingresos fueron aceptables por la novedad del producto pero, al menos en mi caso, veo que si no hay posibilidad de renovarlo de alguna forma al cabo de un tiempo los ingresos tienden a bajar rápidamente.

En estos momentos lo que me planteo es iniciar algún proyecto que combine las dos últimas opciones ya que considero que cualquier ingreso extra que venga de alguna actividad que realmente te apasiona (y que incluso estarías dispuesto a hacer sin cobrar) es la mejor fuente de ingresos extra posible. Si la actividad a desarrollar es verdaderamente un hobby para ti entonces consideraría que los ingresos que puedas obtener con ella por la vía publicitaria son totalmente pasivos.

Concretamente he puesto en marcha recientemente dos blogs de temáticas completamente diferentes sobre las que me apasiona escribir y sobre las que me podría pasar escribiendo horas y horas sin parar sin que me paguen por ello. Si además hay suerte y te puedes sacar un dinerillo extra insertando publicidad pues bienvenido sea.

Realmente no espero que estos ingresos extra vayan a ser relevantes en ninguno de los dos blogs y posiblemente no afecten ni lo más mínimo a mi proyecto de alcanzar la independencia financiera pero me lo estoy pasando como un enano dándoles forma y estoy aprendiendo un montón de cosas interesantes sobre cómo funciona el mundillo de generar ingresos por internet.

El segundo blog está relacionado con mi actividad profesional y en él me limitaría a hacer comentarios técnicos y a proporcionar de forma totalmente gratuita distintos recursos y materiales. No debería quitarme mucho tiempo porque el material ya lo tengo elaborado y en ese blog no tengo activada la opción de hacer comentarios ni de enviarme emails. Además, este blog me permite insertar publicidad de los productos sobre los que tengo derechos de autor con lo que es posible que afecte positivamente a esta fuente de ingresos.

Otro punto a favor de estos proyectos es que no requieren de inversión inicial y te dan libertad total de horarios y de espacio para desarrollarlos. Vamos, que puedo publicar un artículo desde mi casa o desde una playa en el caribe, decidir en qué momento escribo (por la mañana, por la tarde, por la noche, por semana, los fines de semana, en vacaciones) y si me apetece parar de escribir durante un mes pues tampoco sería un problema.

En estos momentos mis ingresos extra utilizando la estrategia ofensiva son ridículos porque durante estos últimos tres años me centré en primer lugar en la gestión eficiente del gasto. Actualmente suponen alrededor del 7% de mis ingresos totales y su evolución desde 2012 ha sido plana tirando hacia abajo.

Será interesante ver como evoluciona la gráfica de estos ingresos durante los próximos años ahora que me paso “al ataque”.