Ferrovial y la corrupción de los políticos
Cuando Ferrovial compró la gestora de aeropuertos británica BAA la Comisión de la Competencia británica le obligó a vender 3 de sus 7 aeropuertos británicos en un plazo determinado.
Fue, aparentemente, una decisión tomada por los políticos con el único objetivo de proteger a los ciudadanos.
Como consecuencia de esta obligación Ferrovial puso en venta el aeropuerto de Gatwick a un precio de 2.200 millones de euros. Debido a la crisis actual y a la obligación de venderlo antes de una fecha determinada finalmente tuvo que venderlo por algo más de 1.650 millones de euros. Si no hubiera sido porque los políticos le obligaron a venderlo para proteger a los ciudadanos Ferrovial no habría vendido Gatwick a ese precio.
Pero recientemente un tribunal británico ha dejado en suspenso la venta de los 2 aeropuertos restantes y ha iniciado un proceso para estudiar más a fondo esta obligación impuesta a Ferrovial porque uno de los integrantes del comité que obligó a Ferrovial a vender 3 aeropuertos antes de una fecha determinada tiene intereses directos en una de las empresas que estaban interesadas en comprar Gatwick.
Este político corrupto debería ser despojado de todo su patrimonio para ser entregado a Ferrovial como compensación parcial de los perjuicios causados y hacer frente a sus responsabilidades penales.
La corrupción de los políticos es el mayor problema de la economía, a lo largo y ancho del mundo.
Si se eliminase la corrupción de los políticos desaparecerían el paro y la pobreza y el nivel de vida de todos los habitantes del planeta subiría de forma espectacular.